martes, noviembre 28, 2006

El servicio

Es algo simple. No hay complicaciones. No es necesario un título universitario para saber que no todas las prendas requieren del mismo cuidado al momento de ser lavadas.
Debo aclarar antes de seguir que semanalmente pago los dólares requeridos por el servicio “distinguido” de lavado.
Luego de meses trabajando acá en Africa (según Niño Pol) veo como mi vestidor día a día pierde a sus aliados más importantes. Comencé dejando notas sobre el cesto de la ropa sucia:
“Por favor, no utilizar la secadora”. Acá en Africa tienen predilección por colocar todo lo que uno pueda echarse al cuerpo en ese aparato que emula las temperaturas del averno; y claro, no hay remera que soporte 500º C. No se observaron los resultados esperados.
A la semana siguiente probé con:
“Por favor NO LAVAR MAS SALVO QUE SE SIGAN LAS INDICACIONES DE LA ETIQUETA”. No se observaron los resultados esperados.
La semana pasada, recapacité, y llegué a la conclusión de que a lo mejor Yennis no sabía leer. Desde la oficina la llamé. No la encontré en su puesto de trabajo. La volví a llamar martes y miércoles y nunca la encontré. El jueves que es el día de lavado llamé a la administradora y en brote inusual de piedad preferí no embarrar a la señorita, que probablemente tenga 20 hijos que alimentar, y simplemente reiteré mi pedido de que no deseaba más el servicio de lavandería.
El sábado, luego de contabilizar la hora número 5 de lavado a mano, comencé a maldecir mi guardarropas, a Woolite y a cuanto artículo de lavandería se me cruzaba por la cabeza. Ni hablar que todas requieren de un método de secado diferente.
Domingo con todo a punto, caí presa del llanto en una profunda depresión al ver la enorme pila de ropa que requería planchado, cada una con instrucciones y temperaturas distintas en su etiqueta. Algo más complicado que una carrera con maestría incuida.
Yennis sos una hija de mil putas, si no aprendes a hacer tu trabajo voy a destriparte con un abrelatas.

06-dic-2006
Actualización acá.

7 comentarios:

QuentinA dijo...

Aprenda Kill: JAMAS subestime las tareas domésticas. Estas hijas de mil p... cobran fortuna por su trabajo. HAY QUE PAGARLO.
No puedo comprender cómo hacen tareas tan complejas y al mismo tiempo no tener la precaución de utilizar condones evitando traer más críos de la misma especie al mundo.

Anónimo dijo...

sos mas boludo de lo que creia, escuche tu voz en el blog de cap intriga y creo que solo sos un putito provocador que se queda en amagues
deberia darte verguenza tu vida y tus preocupaciones por tus "prendas"
de verdad que parecias algo mejor

Niño Pol dijo...

La vergüenza es para gente como vos, usuario anónimo.

Lake dijo...

Así que sos putito y provocador? No quiero ser más tu amigo!

Anónimo dijo...

y se configura un claro caso de violencia doméstica

jejej

Nefastas dijo...

ahh como lo entiendo!!!!
paso por lo mismo en cada visita al norte que me toca hacer, ya sin remedio, tomé la decisión de volver con la valija llena de ropa sucia y hacer la actividad en tierra local, porque perdí más de lo que hubiera deseado...
amo sin límites la forma en que define su estadía..
cómo estarán ahora las cosas con la reelección...la palabra AMOR lo reina todo...me mata..

Anónimo dijo...

shame on you Mr. Kill Mil!

quejas ante tal falta de cuidado? si fuese gran Q. le retiraria mi saludo... conmigo perdio algo de prestigio...

supongo que para no caer tan bajo podría haber dejado algunas hojas de afeitar sueltas entre la ropa sucia de la próxima tanda y asi Y. hubiese sentido el dolor de la perdida... de sangre. la perdida de algunas prendas justifica la satisfacción de la venganza.

selden rose
[nefastO]