sábado, noviembre 01, 2008

Una de las muletillas que utilizo cuando una persona me desagrada es “la mataría con mis propias manos”. Desafortunadamente en algunos casos no puedo aplicar este concepto. ¿Cómo tocar a este cachivache? Ahorcarla implica ensuciar mis manos. Definitivamente la única opción es esperar su pronta muerte que no está demasiado lejos de ocurrir. Bueno también sigo enamorado de los lanzallamas, que en esta cuestión es un método de esterilización.

2 comentarios:

Rita Zanola dijo...

http://www.ciudad.com.ar/2008/11/01/espectaculos/01793757.html


lanzallamas, sin duda...

Señorita Cosmo dijo...

Pero miren si sobrevive al lanzallamas! O sea, ya así es terrible, imagínensela cantando toda carbonizada!! Yo voto porque muera arriba del escenario. O bueno, que se suicide arriba del escenario después de quedar carbonizada.