sábado, abril 29, 2006
Recursos Humanos
Que personas como mis ex jefes dirijan empresas y no estén vendiendo ballenitas por los colectivos, demuestra que como sociedad hemos perdido la batalla. En solo días pasé de ser, Killcinho, Killcito a ser Kill Mill, sí, con nombre y apellido. Por cada lugar que voy pasando, ellos van hablando de mí, siendo que la esclavitud se abolió en 1813. Me llena de orgullo cada vez que dicen "nos robaste un cliente", "que tengo un juicio", "no podes trabajar en Colombia", "no podes trabajar en Ecuador", "no podes trabajar en Venezuela", "no podes trabajar en México". Si por ellos fuera solo debería trabajar en Merlo (San Luis) aterrizando ovnis. ¡CHUPENME LA CONCHA!
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3 comentarios:
Kill, como dicen por ahi "ladran Sancho, señal que cabalgamos". Si sos un ladrón, tenes juicios y blablablabla...para que se molestan tanto en que no te extiendas por el mundo? Ignoralos, no merecen tu tiempo (ni tampoco lo pagan!!!)
saaah que te chupen la concha todos!
Ay ya te cambiaste el sexo cruzando la cordillera? Te felicito!
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