Miss Cultura

Felíz, felíz cumpleaños.
Francisco Bochatón

Cuando nos conocimos con Miss Cultura lo primero que hicimos fue discutir, es lo que hago con cualquier persona en ese momento. Recuerdo que fue sobre música. Seguimos viéndonos ya que trabajamos juntos, pero fue luego de unos años que nos hicimos tan buenos amigos.
Miss Cultura insiste cada vez que puede que a diferencia de su novia y yo, él no es parte de eso que llama "realeza", el pertenece a la "plebe" según sus propias palabras, enarbola una y otra vez la muletilla de que es "el plebeyo". NADA MAS AJENO A LA REALIDAD. Miss Cultura utiliza siempre que puede ese discurso, y ya no engaña a nadie. Sus caprichos son dignos de un emperador romano y no resultaría extraño que en otra vida haya sido el mismo Nerón. Insistentemente aturde con palabras que hablan de derechos humanos y no duda en asistir a las marchas los 24 de marzo, pero sabemos que si gozara de impunidad quemaría ciudades enteras tal como lo hizo el emperador. Tenemos la certeza que en Cuba no aguantaría más de 15 días.
Posee una absoluta falta de cariño hacia el reino animal, tanto que sería capaz de formar una brigada anti Green Peace para frustrar los planes de los ambientalistas que luchan contra la deforestación de la selva Amazónica a favor del asentamiento de lujosos hoteles.
Es mi compañero de viajes (no de negocios), aunque en su haber hay más promesas que pasajes.
Ama la docencia tanto como comprar zapatos, pero no debemos creer que su vocación es simple e inocente, adora moldear la mente de los más jóvenes con la misma perversidad de Erika en "La profesora de piano".
Abraza con pasión los gustos populares y los defiende con capa y espada aunque todos sepamos que su debilidad son las más refinadas costumbres europeas.
En cinco minutos puede desentramar las complejas teorías de campo de Bourdieu y de muchos otros sociólogos y castigar a catedráticos positivistas, pero es incapaz de diferenciar entre dos planes de telefonía celular.
Es un "hacedor" permanente de planes, diagrama en papel mil alternativas, saca más de una flecha y opciones, claro que sobre la vida de los demás, no tiene inconvenientes de manipular las acciones de los demás de una manera inocente, y con al rato volverse sobre sus planes una y otra y otra y otra vez… Volviendo a empezar y volviendo a cambiar en una serie infinita de planes, órdenes y contraórdenes.
Felicidades en tu día.